Hoy, 20 de enero, hace 22 años que falleció una de las actrices más grandes y glamurosas que el mundo del cine ha tenido el honor de presenciar, Audrey Hepburn. 
Desde este blog quiero hacerle un pequeño homenaje a ésta excepcional actriz que nos brindo películas como “Vacaciones en Roma”, “Charada” o el clásico que no pasa de moda “Desayuno con diamantes”.
Con numerosos premios a la espalda entre los que está el Oscar, Globo de Oro y tres premios BAFTA a mejor actriz, vamos a hacer un recorrido por las películas, que en mi opinión, más han cautivado al espectador.
Seguiremos un orden cronológico, por lo que empezaremos por “Vacaciones en Roma”. Estrenada en 1953, una de sus grandes virtudes reside en que se trata de un film atemporal. Además, con los años ha conseguido elevarse a la categoría de multigeneracional. Fue la primera película en la que apareció 
la actriz, y es precisamente eso lo que hace que aún podamos ver la inocencia que irradiaba al inicio de su carrera cinematográfica, además su versatilidad en la gran pantalla dejó al público atónito.
Para los que no hayan visto la película, relata la aventura de Ana, una princesa que decide escaparse de palacio y vivir una vida normal, es ahí donde se encuentra con un periodista norteamericano (Gregory Peck) que en busca de una exclusiva, reconoce a la princesa. Asimismo, es considerable el papel que juega de la ciudad de Roma en la película, podríamos considerarlo como un tercer protagonista.
Lo curioso de esta película es que Elizabeth Taylor era la favorita para el papel protagonista, pero la prueba de cámara de Audrey fue tan buena que el director decidió escogerla a ella, es más, algunas de las escenas fueron incluidas en el tráiler de la película. El director ya atisbaba que la joven Audrey ganaría el Oscar, e incluso el mismo Gregory Peck, que especificó que el nombre de ambos debía aparecer en la misma línea, pues aclaró: “Y si no lo hago, voy a hacer el ridículo, porque esta chica va a ganar el Oscar con su primera interpretación”.
Con una años más encima “Desayuno con diamantes”, nos ofrece otra cara, otro enfoque, otra manera de interpretar. ‘Breakfast at Tiffanys’ (título en inglés) nos presenta a una Audrey más madura. Su personaje en la película refleja la excentricidades y neurosis de cualquier ciudadano de Nueva York de una manera cómica a la par que elegante y glamurosa. Su vida cambia cuando llega a su edificio un escritor que anhela el éxito tanto como ella.
Es una comedia llena de iconos que bajo el escenario de Nueva York y la melodía de “Moon River” consigue recrear la magia del cine que todavía hoy en día perdura.
«Charada», en la línea de una comedia, pero con matices de cine de suspense y de intriga, retrata a una adinerada mujer (Audrey Hepburn) que tras un viaje a la nieve vuelve a su casa y se encuentra con que su marido ha sido 
asesinado En la embajada americana le informan de que su marido, junto a otros cómplices, habían robado un cuarto de millón de dólares al gobierno de los Estados Unidos. El dinero ha desaparecido y todos creen que lo tiene ella.
La intriga, la comedia y el romanticismo son los pilares de la película. Los diálogos, los personajes y la trama son brillantes, y ofrece a los espectadores escenas sorprendentes con cambios en la línea argumental. Son precisamente estos giros en el guión los que hicieron pensar a muchas personas que era una película de Hitchcock -aunque no lo fuese-. Algunos la apodaron como “La mejor película de HItchcock que nunca hizo”.
Con estas películas queda constatado que fue una gran actriz, pero incluso es más importante resaltar su labor humanitaria con UNICEF, que llevó a cabo incluso por encima de su salud.
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